¡Hasta pronto, Armando Gómez!

Armando Altamira G.- ¡Don Armando no se ha ido y nunca se ira! Al contrario, siempre lo recordaremos como un buen amigo,  un gran luchador social y un compañero de trabajo, dijo Agustín Rodríguez Fuentes en la reunión-desayuno que con motivo de reiterar los sentimientos de amistad, hacia Armando Gómez, recientemente fallecido (era el titular de la Secretaría de Carrera Académica), organizó el STUNAM el 28 de febrero; un reconocimiento póstumo en el edificio de la Comisiones  Mixtas. Hubo la asistencia del Comité Ejecutivo del sindicato, familiares de Armando y numerosos delegados sindicales y trabajadores.

Miembros del Comité Ejecutivo y familiares en el
homenaje postumo a armando Gómez

Alberto Pulido Aranda y Pablo Gómez, integrantes del Comité Ejecutivo, expresaron sus sentimientos de amistad y compañerismo hacia el amigo y compañero fallecido. Varios colaboradores suyos en su Secretaría,  trabajadores, amigos, su hijo Carlos Lenin  y su esposa  Araceli Urbina, hicieron los propio. Se le guardó un minuto de silencio, pero como era una reunión de camaradería con Armando, en ausencia, más que de pesimismo, también se le ofreció un minuto de aplausos. El sindicato nombró una comisión para organizar este reconocimiento póstumo.

Agustín Rodríguez, recordando a Armando Gómez

 El Secretario General del sindicato hizo la reflexión sobre nuestro transitar por este mundo y el momento ineludible de pasar a otra dimensión. Tan es así que hoy Armando nos mantiene reunidos en torno a su memoria. Es ocasión para buscar la posibilidad de esa revisión interna, de cada uno de nosotros; no es éste un momento de tristeza y dolor y sí lo es de alegría, de reconocimiento para el trabajo que desarrolló nuestro compañero Armando Gómez.

     Más temprano que tarde vamos a llegar a recorrer ese mismo camino. Citó las palabras de don Alberto Pulido, “nadie tenemos comprada la vida”. Y, desde estos momentos, necesitamos  prepararnos para ello y esto debe ser parte de nuestras  actividades cotidianas. Lo común es pensar que eso les pasará a otros, pero no a nosotros. Que unos se irán y otros nos quedamos. La realidad es que todos vamos a seguir ese camino y sobre la marcha tenemos que ir aprendiendo. Los pasos que hoy estamos dando serán ese acercamiento espiritual y ese reconocimiento hacia nuestro compañero Armando Gómez.